La celulitis o «piel naranja» se conoce comúnmente como la acumulación de tejido adiposo en zonas concretas del cuerpo, formado nódulos de grasa que traicionan la piel y dificultan la microcirulación de la zona.
La aparición de la celulitis se debe a una alteración de la circulación de la capa grasa (hipodermis). El tejido graso aumenta y las paredes se engrosan formando así esos hoyuelos característicos. Es por eso tan importante realizar ejercicio para reforzar glúteos y muslos
Tipos de celulitis
· Celulitis blanda
Este tipo es la más común. Se distingue por su flacidez y un aspecto más gelatinosos. El tejido de la zona donde se encuentra se hunde al tocarlo, no presentando consistencia, y se mueve cuando cambiamos de postura. Este tipo de celulitis no es (en la mayoría de casos) dolorosa y normalmente la encontramos en muslos y glúteos.
Aparece normalmente a partir de los 40 años y sobre todo en mujeres que no practican deportes o que han tenido cambios muy drásticos de dietas y cambios de peso, en algunos casos esta provoca sensaciones de pesadez.
·Celulitis dura o fibrosa
Se considera la peor y la piel aparece endurecida y consistente. Puede llegar a ser muy dolorosa incluso sin tocar o apretar los nódulos. La distinguimos por las perturbaciones de las sensibilidad cutánea que produce, por las alteraciones de temperatura que causa sensación de calor o frío en las zona donde se localiza.
La piel está sometida a tanta presión cuando se tiene celulitis compacta que en muchas ocasiones aparecen estrías. Es muy difícil de pellizcar con los dedos, normalmente este tipo de celulitis aparecen en personas jóvenes de estructura robusta.
·Celulitis edematosa
Suele afectar principalmente a la parte la lateral de los muslos y en las mismas nalgas, y si no se trata adecuadamente, con los años puede degenerar varices.
De consistencia pastosa con nudosidades (con mayor relevancia en posición de declive) Es dolorosa al tacto y a veces hasta espontáneamente.
En ella encontramos insuficiencia circulatoria venosa y linfática de miembros inferiores, signos de edemas, varices, telangiectasias, fragilidad capilar.
Una de las características de este tipo de celulitis es la consistencia acolchada del tejido, el color y la temperatura de la piel por el compromiso circulatorio. En ella las piernas adquieren en su segmento gemelo-tobillo, un aspecto de «pierna de columna» y dificultad para movilizarse.
Generalmente se inicia en la pubertad, tiene consecuencias psicológicas con respecto a la personalidad y trastornos emocionales, y se agrava en la menopausia.
·Celulitis mixta
Este tipo de celulitis es la combinación de cualquiera de las mencionadas anteriormente, ya que en general no se encuentra en forma pura.
Hay pacientes que presentan celulitis dura en la cara externa del muslo, celulitis fláccida en la cara interna del muslo y glúteos, o celulitis dura en piernas y fláccida en abdomen
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